"Que tu Misericordia Señor venga sobre nosotros como lo esperamos de ti". Salmo 32
Todos los que creemos en Dios, estamos invitados a crecer en el conocimiento de la Fe, pues "quien no tiene este conocimiento es ciego y corto de vista"... (Conf. 2º P 1, 9)
La invitación es a revisarnos como creyentes en Dios. Un Dios que se reveló como Vida, como Padre conviertiéndonos en Hermanos, y que viviendo el perdón, condenó el pecado llamando a una vida digna. ( Conf. Jn 8, 10 -11)
El llamado de Dios es un don maravilloso y de igual manera una responsabilidad profunda, que conlleva a plasmar la fe en todos los aspectos de nuestra vida.
Es cuestionante que muchas personas, incluso activas en el servicio, no han llegado al conocimiento del Hijo de Dios, ni a la madurez que nos permitirá alcanzar la plenitud de Cristo.
Por eso, como niños, se dejan mover por cualquier oleaje, o cualquier viento de doctrina, y, a quienes los hombres astutos pueden engañar, para arrastrarlos al error. (Conf. Ef 4, 13 - 14)
Dios en su sabiduría infinita se reveló a los hombres a través de su Hijo Jesús, garantizándonos así conocer el verdadero rostro de Dios, (Jn 14, 9).
Con la llegada de Jesús, el Hijo de Dios, llegaba la luz al mundo, "la Luz Verdadera que ilumina a todo hombre". (Conf. Jn 1, 9)
Con la llegada de Jesús, el Hijo de Dios, llegaba la luz al mundo, "la Luz Verdadera que ilumina a todo hombre". (Conf. Jn 1, 9)
Es a la luz de Cristo que debemos mirarnos, y revisar si nuestras obras, pensamientos y opciones se conforman a la fe que decimos profesar...
Elizabeth
...Continuará
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